Cueva de Ekedeshik
Cueva de Ekedeshik: una joya oculta en Turkmenistán
Turkmenistán es un país de historia antigua, desiertos inhóspitos e hitos culturales únicos, y uno de sus secretos mejor guardados es Ekedeshik. Lejos en el desierto del país, este lugar menos conocido representa grandes valores históricos y arqueológicos, abriendo un vistazo a la vida de la humanidad en la antigüedad.
La cueva de Ekedeshik se encuentra a 225 kilómetros de Bairam-Ali, en el distrito de Tagta-Bazar. Esta zona fue antaño una encrucijada de las principales rutas de caravanas que conectaban Irán y Jorasán. En turcomano, Ekedeshik se traduce como «agujero único» o «una entrada», y describe una serie de viviendas cueva excavadas en los acantilados rocosos. Las cuevas, que pueden fecharse a principios de la Edad Media, se habían utilizado como refugio, en algunos rituales e incluso posiblemente como lugar para esconderse durante los conflictos.
De hecho, los orígenes y propósitos exactos de Ekedeshik siguen siendo objeto de investigación, lo que añade un aire de misterio a este extraordinario lugar. Según la leyenda, o la excavaron los soldados de Alejandro Magno o se construyó con ayuda de los míticos jinn. Sin embargo, las excavaciones arqueológicas han demostrado que las cuevas se utilizaron como viviendas ya en el siglo I a.C.
Significado histórico de Ekedeshik y disposición de la arquitectura
Se considera que las cuevas de Ekedeshik fueron uno de los asentamientos que florecieron en esta dura tierra desértica. Los arqueólogos creen que las casas fueron talladas directamente en las rocas, lo que revela el ingenio de las gentes que vivieron aquí. Según algunos investigadores, Ekedeshik podría haber funcionado como escala para viajeros y comerciantes a través de la Ruta de la Seda, dada la posición estratégica de Turkmenistán a lo largo de esta antigua ruta comercial.
Además, los arqueólogos creen que Ekedeshik era una ermita subterránea para monjes cristianos o budistas que vivían en Asia Central en la antigüedad. Esta suposición se ve corroborada por el hallazgo de otros complejos subterráneos similares en la región, todos los cuales se cree que fueron construidos por monjes de estas tradiciones religiosas.
El complejo de cuevas contiene dos niveles distintos. En la planta baja, se diseñó ingeniosamente un sistema único de suministro natural de agua procedente de fuentes subterráneas. Los niveles superiores contienen un conjunto de viviendas, cocinas, salas y una estructura similar a un altar.
La construcción de las cuevas demuestra que no estaban pensadas como refugios temporales, sino para vivir en ellas durante periodos más largos. Algunas cuevas presentan tallas intrincadas e incluso algunas decoraciones primitivas, lo que da una idea de las prácticas culturales y posiblemente religiosas de sus habitantes.


Visita a la cueva de Ekedeshik
Ekedeshik es un ejemplo permanente de la resistencia y el ingenio de las antiguas civilizaciones de Turkmenistán. Sus misteriosas cuevas, llenas de historia e intriga, ofrecen una perspectiva única del rico patrimonio de esta región. Para quienes gustan de salirse de los caminos trillados, Ekedeshik ofrece un viaje inolvidable al corazón del legado histórico y cultural de Turkmenistán.
Para llegar a Ekedeshik, hay que atravesar las zonas más escarpadas y áridas de Turkmenistán, lo que añade un elemento de aventura a toda la experiencia. Aunque no tiene tanto renombre como otros lugares emblemáticos de Turkmenistán, como el cráter de gas de Darvaza o la antigua ciudad de Merv, Ekedeshik es una experiencia única y más tranquila para el viajero interesado en la historia y la arqueología.
Se aconseja a los visitantes de Ekedeshik que busquen los servicios de guías locales familiarizados con la región y su historia. Como la zona no está comercializada, mantiene su belleza natural y virgen, proporcionando una sensación cruda y no adulterada de los tesoros históricos de Turkmenistán.
Otros lugares de interés en Turkmenistán
Página actualizada el 9.12.2024